Es muy importante saber que existen diferentes tipos de azúcares y que estos se diferencian en su calidad nutricional. En el siguiente artículo explicamos los diferentes tipos de azúcar y sus principales diferencias.

Cuando se habla de azúcar, siempre se dice que únicamente tomas calorías vacías de otros nutrientes. Cuando finalices de leer esta página se dará cuente que esto sólo es así para el azúcar refinado. Existen otros azúcares no refinados que son ricos en vitaminas y minerales.

No tomes sólo calorías con el azúcar, toma además vitaminas, minerales….

PANELA

La Panela es considerada el azúcar más puro ya que se obtiene de la evaporación y cristalización del jugo de la caña de azúcar.
Es mejor incluso que el azúcar integral de caña por su particular forma de cristalizar.
Al no sufrir ningún refinado, ni centrifugado, ni otro tipo de procedimiento químico obtenemos un alimento que, a diferencia del azúcar blanco, conserva todos los nutrientes de la caña de azúcar.
Es un azúcar muy típico en la mayoría de los países de América latina.

Propiedades y usos

El azúcar sacarosa es el principal constituyente de la Panela, con un contenido ntre 75 y 85% del peso seco. También contiene glucosa y fructosa en menor medida.

Aporta cantidades importantes de vitaminas A, D, E, C y algunas del grupo B.

Respecto a los minerales destacan entre otros el calcio, hierro, potasio, fósforo, magnesio, cobre, zinc y manganeso.
La Panela contiene 5 veces más minerales que el azúcar integral de caña y 50 veces más minerales que el azúcar blanco.
información nutricional.

AZÚCAR INTEGRAL DE CAÑA

Es muy importante diferenciar entre azúcar integral de caña y azúcar moreno ya que éste último suele ser azúcar refinado (blanco) que ha sufrido un proceso de calentamiento y por tanto se ha pardeado, este no es el auténtico azúcar integral de caña.

Hemos de ser conscientes que para que tenga propiedades nutricionales debe de ser un azúcar integral de caña realmente sin refinar.
Hay azúcares morenos que son casi blancos, ni huelen ni se enganchan a los dedos. Realmente el valor en nutrientes de estos azucares tan refinados es casi similar al azúcar blanco o refinado.

El azúcar integral de caña se obtiene mediante la trituración de la caña de azúcar. Obtendremos un jugo que tiende a cristalizar. Luego se «lava» con agua caliente y se reduce a polvo o grano lo más fino posible.
Este azúcar conserva todas sus propiedades nutricionales ya que tampoco ha sido refinado y por eso también recibe el nombre de azúcar crudo.

El azúcar integral de caña tiene un sabor muy agradable, como a Regaliz y su textura es un poco pegajosa ya que es muy rico en melaza o «miel de caña».

Cuando compremos azúcar integral veremos que según el fabricante el azúcar es mucho, poco o nada pegajoso.

AZÚCAR REFINADO O BLANCO

Para conseguir el azúcar blanco hemos de realizar múltiples refinados y blanqueos. Al final tenemos un producto de sabor muy suave, pero sin nutrientes, siendo únicamente lo que se ha denominado “calorías vacías”
.
Los endocrinólogos, cardiólogos y dentistas son los que más combaten el azúcar refinado. En terrones o en polvo, en bollería, caramelos, refrescos, etc, el azúcar refinado es considerado una de las mayores causas de caries dentales, de obesidad, de aterosclerosis, inflamaciones articulares (artritis…), de diabetes en personas propensas e, incluso, de infertilidad en
las mujeres El azúcar refinado es de rápida absorción ya que carece de vitaminas y minerales que la controlen, pasando rápidamente a la sangre y liberando la hormona llamada insulina, que transforma el azúcar en grasa.
Este desajuste favorece el sobrepeso. También favorece la diabetes por agotamiento de las células del páncreas (que son las que segregan la
insulina).

Al liberarse la insulina por la absorción rápida del azúcar, se provoca una bajada de azúcar en sangre (hipoglucemia) estado que se caracteriza por síntomas conocidos como el “bajón” de las 11 horas: Fatiga, depresión, falta de concentración… En este estado de hipoglucemia se busca azúcar ó café ya que su efecto es liberar más azúcares desde el hígado a la sangre; de esta forma se crea un círculo vicioso peligroso, una dependencia similar a la de una droga.

Los azúcares existentes en los alimentos hacen innecesario el uso de azúcar refinado.

Los azúcares no refinados (panela e integral de caña) al ser ricos en vitaminas y minerales se absorben de forma más controlada. Por el contrario el azúcar refinado (ó blanco) al carecer de vitaminas y minerales se absorbe de forma incontrolada lo que produce numerosos desequilibrios.